Blanco y negro.

Todos tenemos un mal y un buen genio.
No somos, ni blanco o negro, somos un poco de los dos.
Hay que saber dominar el bueno.
Eso no quiere decir que el malo se vaya.
Esta ahí, intacto, pero siempre dominado por el bueno. 
Y antes de que ese negro despierte y salga a luz.
Piensa y recapacita, que con paciencia lo podemos volver a dominar. 
Recuerda ante todas las cosas, que no podemos ser perfectos.
Pero si podemos, querer ser mejores día a día, eso es lo que vale. 
Nos hacemos valer ante cada situación.
Con lo que demostramos que somos.
No solo con las palabras demostramos lo que somos.
Mas que nada con los actos. 
Cuando una persona ante todas las cosas logra ser sincera.
Ya ha logrado mucho en su vida.
Porque no hay amor si no se es sincero. 
No hay amistad, si no se es sincera.
No hay nada en la vida si no se es sincero.
Ahí es cuando demostramos lo que somos.
Nos hacemos valer como personas.
Cuando alguna situación se nos va de la mano.
O nos equivocamos y nos domina ese mal genio.
Pero reconocemos y tratamos de mejorar, ahí es cuando valemos.